La primera imagen me impactó. Pero no tanto como las demás… Madre mía
Agee no es como el resto de los osos polares que has visto en cautiverio o en estado salvaje. Su mejor amigo es su entrenador, Mark Abbot Dumas. Él la adoptó y comenzó a criarla cuando ella era apenas un cachorro diminuto. Ahora, puede pelear y jugar con ella, y entrenarla sin el más mínimo temor.
Agee no es como el resto de los osos polares que has visto en cautiverio o en estado salvaje. Su mejor amigo es su entrenador, Mark Abbot Dumas. Él la adoptó y comenzó a criarla cuando ella era apenas un cachorro diminuto. Ahora, puede pelear y jugar con ella, y entrenarla sin el más mínimo temor.