La oposición acusó al Gobierno de utilizar armas químicas en un bombardeo este miércoles a una zona rebelde cerca de Damasco.
Un posible ataque del Gobierno sirio con gases neurotóxicos sobre un enclave rebelde cerca de Damasco, y que según la oposición en ese país provocó alrededor de 1.300 muertos, suscitó un enorme impacto internacional, a pesar de que fue rotundamente desmentido por el régimen del presidente Bashar Al Asad.