Arqueólogos italianos hallaron en el suroeste de Turquía una antigua cueva a través de la cual, según la mitología romana, las almas de los muertos iban al inframundo.
El descubrimiento se produjo durante las excavaciones de las ruinas de la antigua ciudad de Hierápolis, que fue parte del estado de Frigia fundado en los siglos XIII-X a. C. Los romanos llamaron a esta cueva 'las Puertas de Plutón', el dios romano del inframundo, y debido al peligro que representaba, algunos incluso la denominaron 'las puertas del infierno'.